Published:
[Erscheinungsort nicht ermittelbar]: Universidad de Córdoba, UCOPress, 2015
Language:
Spanish
Identifier:
Origination:
University thesis:
Dissertation, Universidad de Córdoba, UCOPress, 2015
Footnote:
Description:
Introducción o motivación de la tesis En las últimas dos décadas estamos asistiendo a un incremento del interés científico por el estudio de las relaciones afectivo-sexuales durante la adolescencia. Los estudios psicosociales, y en especial los psicoevolutivos, han desplazado a aquellos que, con una visión más clínica de la adolescencia, infravaloraban la importancia que las relaciones sentimentales tienen para los adolescentes y para su desarrollo. Los cambios hormonales y el desarrollo de los caracteres sexuales secundarios, ligados a la maduración sexual, provocan que chicos y chicas comiencen a sentirse atraídos entre sí. Se establecen nuevas formas de relaciones sociales, con connotaciones y matices diferentes a los mantenidos hasta ese momento. La atracción sexual supone un conjunto de comportamientos interactivos complejos y secuenciados en los cuales se producirá un proceso de negociación de significados en torno al deseo y al consentimiento. Estas nuevas interacciones sitúan a los adolescentes ante la tarea de aprender a modular y expresar de forma correcta sus sentimientos y atracción sexual, no solo considerando al otro, sino también teniendo en cuenta las normas y convenciones sociales de la cultura de referencia (Ortega-Rivera, Sánchez y Ortega, 2010). Cuando este proceso de ajuste y negociación no es recíproco, podemos encontrarnos que las progresivas aproximaciones afectivo-sexuales son vividas como molestas y desagradables para una o ambas partes, llegando a ser incluso violentas, lo que en la literatura anglosajona se conoce como sexual harassment. La presencia de estos comportamientos en los grupos de iguales adolescentes podrían consolidarse en estilos de relación agresivos y desajustados que se trasladarían al interior de las primeras relaciones de pareja que surgen en el interior de estos grupos (Connolly y McIsasac, 2011), dando lugar al fenómeno de la violencia en las parejas adolescentes o dating violence (Ortega y Sánchez, 2011). Los estudios internacionales y nacionales que han analizado la prevalencia de los comportamientos violentos en las relaciones afectivo-sexuales de los adolescentes, nos muestran un panorama bastante desalentador. Los índices de prevalencia son muy altos, si bien encontramos una variabilidad entre el 20% y el 60% (Archer, 2000; Chase, Treboux, O`Leary y Strassberg, 1998; Fernández-Fuertes y Fuertes-Martín, 2005; Hird, 2000; Lewis y Fremouw, 2000; . ; Introduction or incentive of the thesis The study of dating relationships during adolescence has received an important interest by scientific community in the last decades. Developmental and educative studies have emphasized the relevant role of these relationships for adolescent' development, in contrast to clinical studies that focused on the risk that dating behavior can have on adolescent health. The biological changes which accompany adolescence play an important role in the changes which occur in the interpersonal relationships of adolescents. With sexual maturity, changes in the levels of hormones and the development of secondary sexual characteristics, adolescents begin to feel sexual attraction for others. This results in changes in the quality and form of their social relations. Some adolescents move from being friends to being the object of desire of their peers. On other occasions a new peer becomes the recipient of a new and powerful feeling: love. From this new emotional perspective, many interpersonal encounters are focused on demonstrating (either implicitly or explicitly) one individual's interest and attraction for another. One of the developmental tasks for adolescents during this age consists in learning to express their own desires and intentions to others, and reciprocally, to learn to receive such information from others according to cultural conventions and social rules (Ortega-Rivera, Sánchez y Ortega, 2010). When adolescents fail to interpret social keys from others or, in contrast, show difficulties in the expression of their sexual needs, peer interactions can be experienced as unwanted or harassed by certain adolescents. When sexual harassment occurs among adolescents, can leads on aggressive interactional styles that can be translated into dating relationships (Connolly y McIsasac, 2011), as a form of dating violence (Ortega y Sánchez, 2011). The prevalence rates of studies conducted in Europe and North America about dating aggression and victimization and sexual harassment among peers have been alarming and controversial, with indices which varies between 20% and 60% (Archer, 2000; Chase, Treboux, O`Leary y Strassberg, 1998; Fernández-Fuertes y Fuertes-Martín, 2005; Hird, 2000; Lewis y Fremouw, 2000; Menesini y Nocentini, 2008; Moffit, Caspi, Rutter y Silva, 2002; Muñoz-Rivas, Graña, O'Leary y González, 2007; Sánchez, Ortega-Rivera, Ortega y Viejo, 2008). Physical and psychological dating aggressive behaviors have been more studied than dating sexual violence. .